Capitulo 17
Isabella
—¿Por
qué me estás evitando?
Él
giró la cabeza con una mirada de sorpresa.
—Isabella,
por Dios, me has asustado. —Recordé aquellas primeras veces, cuando era él
quien me sorprendía a mí y cómo me daba un vuelco el corazón. Sentía como si lo
estuviera perdiendo, y él ni siquiera se había marchado todavía. Los dos
habíamos estado ocupados últimamente; yo había tenido al menos tres turnos a la
semana, lo que era bueno, pero según habían ido pasando las semanas, me había
quedado claro que no nos veíamos tanto como antes, porque él se empeñaba en
ello. Lo miré expectante hasta que apretó los labios y soltó un suspiro—. Tengo
muchas cosas que hacer… Se acercan los finales, tengo que pensar qué hacer con
la casa, con todas las cosas… —Su voz se apagó.
—Me
estás evitando.
Algo
que parecía dolor se apoderó de su rostro por un breve segundo antes de que su
expresión se volviera más neutra.
—Isabella…
—susurró—. ¿No te parece que será más fácil luego si nosotros…?