sábado, 3 de marzo de 2018

Enredos de amor Capitulo 23


Capitulo 23


Cinco pequeñas palabras
Edward
Estaba sentado en el porche cuando una cerveza apareció frente a mí.

―Gracias ―le dije a Charlie.

Se sentó a mi lado, sin decir una palabra.

Era nuestra última noche antes de regresar. Habían preparado una cena junto al lago, e incluso me las arreglé para encender la fogata. Al igual que en la primera noche, el cielo estaba cubierto de estrellas.

Isabella jugó con Taigi, persiguiéndolo alrededor de la fogata. Había pasado el día mostrándome todo Cypress. Tenía casi una cosa de todo: un cine, una tienda de comestibles, un centro comercial, y en cada uno, me di cuenta de cómo todos le daban la bienvenida, ya fuera con un abrazo, un beso o cosas gratis. Cada uno de ellos también le agradeció el dinero que les había prestado; incluso había ayudado a financiar un nuevo centro de artes para la secundaria.

―Sabes que todavía no me agradas, ¿verdad? ―me dijo, abriendo su lata y atrayendo mi atención.

―Sí. Tal vez cuando volvamos la próxima vez, te convenceré más ―respondí, tomando un trago.

―Nunca va a suceder ―murmuró.

Enredos de Amor Capitulo 24

Capitulo 24
Tick, tick, BOOM
Isabella
―Hogar dulce hogar ―le dije a Taigi, abriendo la puerta del apartamento para nosotros. Taigi no estaba tan emocionado como yo. Sólo camino hacia su cama y se hizo un ovillo―. Está bien.

―Puede que sólo esté cansado ―dijo Edwadr, poniendo los bolsos en la puerta antes de entrar en mi cocina―. Tu refrigerador está vacío. Isabella.

―Pero tengo un celular y una lista de lugares para llevar.

―Después de tener la comida de tu madre por el fin de semana, comida para llevar simplemente se siente como una decepción ―respondió, tomando agua―. ¿La llamaste para avisarle que llegamos?

―Rayos ―dije, sacando mi teléfono.

Negó, caminando hacia mi ventana y descansando contra la pared con una almohada a la espalda.

―¿Cuándo vuelves a trabajar? ―le pregunté mientras marcaba.

―Puedo volver el viernes. ―Sacó su teléfono.

Enredos de Amor Capitulo 25


Capitulo 25
Ámame lo suficiente para…
Isabella
Más tarde no llegó por dos días. Cada vez que intentaba hablar sobre eso, mis ojos empezaban a arder y lloraba de nuevo. Vicky y yo nos sentamos en la playa, la cabeza de Taigi sobre mi regazo mientras el sol salía en el horizonte. Ella me dio una barra de chocolate, y partí un trozo.

―Él me llamó ―susurró―. Edward. Llamó anoche, queriendo saber si había hablado contigo. Sonaba como si estuviese…

―Por favor, no ―le supliqué, acariciando el pelaje de Taigi―. Cada vez que pienso en él, pienso en ella, embarazada. Si seguía en su vida, entonces hubiese estado celosa, y molesta, y… obligada a verla siempre y cuando él quisiera estar conmigo. Sólo me veo herida, e hiriéndolo a él a cambio.

Sobre todo, el hecho de que ni siquiera estaba segura si quería hijos, menos ser madrastra de nadie.

―¿Entonces nunca volverás a hablarlo? No es su culpa, Bella.

ORACION A MI SEXY VAMPIRITO

Edward de mi guarda
De mi sexy compañia
Bebete mi sangre
De noche y de Dia
Hasta que caiga en tus brazos
Y sea tu marca de heroina