Capitulo
11
Cada noche cuando la puerta se abriría, me
encogía, preguntándome si esa noche sería aquel en el que finalmente trajo una
mujer a casa con él. Seguí preparándome para ello. Edward era una persona muy
sexual. Tanya siempre solía hacer referencia a su insaciable apetito. Eso
siempre me hacía querer vomitar.
Él no sería célibe para siempre.