CAP XXVII

POV EDWARD

-Papá-dijo bella –Dejame que te explique

-¿Qué me van a decir?-grito

-¿Qué te acuestas con tu hermano?- y tu miserable-dijo tomandome por la camisa

-Carlisle no-grito mi madre

-Diablos Edward, es tu hermana, mi princesa-dijo el. –Es tu hermana-repitio, soltándome tan fuerte que me estrelle contra el piso.

-Edward-grito bella y corrió a mi lado, estaba por tocarme cuando mi padre apreso su muñeca y la jalo.

-dejame-le dijo ella

-¿Cómo pudiste bella?, ¿Cómo?-grito

-carlisle-dijo mi madre-Dejalos hablar-

-¿Qué van a decir esme?, ¿Qué?-suspiro frustrado soltando la muñeca de bella, la tenia tan fuertemente apresada que quedo una marca roja alrededor de esta.-

-Papi-dijo bella-No queríamos… ninguno de verdad-

-Mentirosa- grito el, mi angel los vio con ojos asustados, yo seguía sin decir nada, no encontraba mi voz.

-¿y tu infeliz?-se dirigió a mi-Es tu hermana, mi bebita, tu trabajo era cuidarla no pervertirla.

-Carlisle-grito mamá-Dejalo hablar-

-No quiero escuchar nada-dijo el llevando sus manos a su cabello en un signo claro de frustración.

-La amo-dije al fin-No lo planee, nadie lo hizo, solo paso-dije

-Lo siento papi-susurro bella-De verdad lo lamento-sollozo

-No puedo creerlo, ¿Qué hice mal con ustedes?, ¿Qué?-grito

-nada-dijo bella-tu no hiciste nada, es solo que nos amamos y…-

-no repitas eso-dijo, haciendo que mi madre pegara un saltito por el susto, ella solo lloraba, casi no hablaba, alternaba su mirada entre bella y yo, sus ojos solo mostraban desconcierto, decepcion, pero no furia como los de papá.

-No te quiero en la casa Edward-

-No puedes correrlo-dijo bella de pronto-Es tu hijo, no puedes echarla a la calle sin mas-grito

-Eso debió pensarlo antes de acostarse contigo-dijo el dándonos la espalda, sus cuerpo se mostraba rigido.

-Padre deja que…-

-Ya te dije-continuo el-No te quiero aquí, para mi estas muerto-

-si Edward se va, me voy con el-dijo bella tomando mi mano

-No la toques- tomo su brazos bruscamente y la alejo de mi

-Sueltala, la estas lastimando-le dije, el se giro bruscamente.

-Eras mi orgullo Edward, tu y tu hermana lo eran- su mirada era una mascara de dolor y frustración.

-No lo planee-repeti-La amo y no me arrepiento por que ella me ama tambien- dije y no lo vi venir, en un segundo sentí la mano estampada en mi mejilla, con tanta fuerza que hasta me tambalee lentamente, nunca, en todos los años mi padre me habia golpeado, aunque sabia que este lo merecía.

-Edward-grito mamá.

-Papá no-grito bella cuando me tomo de la camisa y levanto su mano para golpearme nuevamente, no hice nada, es mi padre y se que esta molesto, si esto le ayudaba a sacar un poco de su frustración lo dejaría.

-Carlisle, no-dijo mi madre llegando a su lado-Es nuestro hijo, no puedes hacer esto-

-Claro que puedo-dijo soltándome al fin-Vete-espeto al final

-Mamá di algo-imploro bella, mamá solo me dirigió una mirada de nostalgia pero se giro de nueva cuenta y acudió a su lado, junto a papá.

-Recogeré mis cosas-dije después de un rato.

-No, no pueden correrlo-dijo bella de pie detrás de mis padres-Es su hijo-añadio-Por dios santo-

-Basta bella-dijo papá-Nada de lo que digas me hara cambiar de opinión-

-Pues me voy con el-dijo ella

-Eso si que no-dijo mi padre-tu te quedas, añadió-Regresaras al internado a pasar las vacaciones ahí.

-no-dijo ella-Me voy con Edward, no puede creer que hagan esto-sollozo-¿Mamá?-pidio

-Yo…yo no se-dijo ella-Dios, jamás pensé que algo asi pasara, jamás pensé pasar por esto nuevamente-añadio abrazándose a si misma.

-¿Qué esperas para irte?-grito papá

-No, no te vayas-dijo bella llegando a mi lado

-Es mejor-le dije acariciando su mejilla-Dejemos que las cosas se calmen-añadi, al ver sus ojos repletos de lagrimas

-Me voy contigo-dijo

-No bella-hablo nuevamente mi padre-Eres menor de edad y no puedes salir de esta casa, te lo prohíbo, al igual que te prohíbo volver a ver a tu… a Edward-dijo fríamente

-no puedes prohibirme nada-dijo ella-no puedes-grito

-Claro que puedo, si el se te acerca de nuevo, emprenderé un proceso legal-dijo, mi madre suspiro y llevo las manos a su boca, estaba en shock, esto era demasiado para ella.

-papá, no puedes-dijo ella

-Hare lo que sea para proteger a mi familia-sentencio

-Edward es tu familia tambien-grito bella exasperada,

-Para mi esta muerto-dijo el, me dolio en el alma

-Es tu hijo, no puedes hacerle esto, no puedes-sollozo mi angel, las lagrimas caian como cascada por sus mejillas.

-Ya no tengo ningun hijo- dijo el

-papá-suplico bella-No lo hagas-dijo acercándose y tocando su hombro.

-Dejalo bella-le dije-Es lo mejor-

-no, no es lo mejor, el no puede hacerte esto-me dijo, golpeando el suelo con su pie.

-Amo…-mi padre me dirigió una mirada fría-Es mejor bella, por el momento-

-entonces me voy contigo-dijo ella

-No-grito papá

-no empeoremos las cosas-le pedi-Deja que se calmen y luego hablaremos-añadi

-no quiero que te vayas-dijo-¿A dónde se supone que ira? ¡No tiene dinero!-le grito a mi padre.

-Eso debió pensarlo antes-dijo el-Es hora de que aprenda a valerse por si mismo, enfrentar sus responsabilidades-

-Papá-dijo ella

-¿Qué esperas?-dijo dirigiéndose a mi-Lárgate de una vez- Deje las llaves del auto sobre la isla de la cocina y camine a la salida

-No puedes irte, no me dejes-pidio bella

-No lo hare-le dije-Solo necesitamos que se calmen las cosas

-Es un … no puede hacerte esto, diablos somos familia-dijo ella

-Creo que perdi ese derecho el dia que me enamore de ti-le dije

-Edward-susurro ella, la abrase pero de pronto fue arrancada de mis brazos por mi padre. Solto a bella y ella trastabillo, mamá la sujeto para que no cayera, a mi tomo por el brazo y me saco de la casa.

-suéltalo-grito bella

-No regreses nunca- dijo cerrando la puerta en mis narices, bufe, no podía gritarle, pese a todo era mi padre y lo amaba. Levante mi puño y quise golpear la puerta pero me contuve. –Maldición- exclame, las cosas estaban jodidamente mal, meti mis manos en los bolsillos de mi pantalón y comencé a caminar en la penumbra de la noche, hacia frio por lo que cerre la cremallera de mi chaqueta, era una noche sin luna, estaba completamente obscuro, me gire para ver la casa, la luz de la sala seguía encendida, sabia que las cosas no irían bien, pero jamás me espere algo como esto, solte un suspiro y segui caminando, no tenia a donde ir, no podía ir con los chicos, emmett me odia y no lo culpo, mis amigos viven en Seattle pero no quería ir y dejar a bella sola con todo esto, ella debe estar pasándolo peor que yo. Camine hasta el pueblo, no estaba lejos, entre en la vieja cafetería de los Stalin, al abrir la puerta la campanilla sono, algunas cabezas giraron en mi dirección, les di una media sonrisa y regresaron a la suyo, camine hasta el fila del pasillo y me senté en la ultima mesa, la que esta justo al lado de la venta. Cuando la camarera se acerco pedi un expreso doble. Despues de unos cuantos minutos regreso con una tasa de café humeante, di el primer sorbo y mi celular sono. Deje la tasa sobre la mesa y conteste era mi angel.

-Bella, amor-dije

-Edward-me dijo ella sollozando-¿Dónde estas?-cuestiono entre un sollozo.

-en la cafetería del pueblo- dije -¿Cómo estas?-

-mal-respondio ella- Le dije a papá que lo odio-solto en un susurro, sollozando despues.

-Eso no es verdad-le dije-Eres demasiado buena, para odiar a alguien, además amas a nuestros padres-dije medio sonriendo

-No lo odio-me dijo ella-Es solo que…Odio que nos haga esto-

-Lo se-dije

¿Sabes?-suspiro-.Papá, me encerró en la habitación para evitar que me escape-dijo ella medio riendo- como si eso fuera a detenerme- añadió.

-Amor-le dije-Es mejor que no empeoremos las cosas por el momento, Si vienes conmigo, papá enloquecerá-dije en un suspiro

-No me importa-dijo ella -¿No quieres…?-pregunto en un susurro

-No hay nada que desee mas-le dije-pero… escuchaste a papá, el emprenderá acciones legales-dije al final.

-No puede creer que haga esto-dijo y yo suspire -¿Dónde te quedaras?-

-Supongo que un hotel-dije, la verdad no sabia donde, tenia algo de dinero pero no me alcanzaría para mucho tiempo.

-Por que no vas con Los Masen-me dijo ella

-No-respondí inmediatamente

-¿Por qué?-dijo ella medio molesta

-pues por que no-respondí-No quiero molestar

-Edward, Elizabeth te adora y lucas es mi amigo, no molestas-dijo ella

-amor, prefiero quedarme en otro lugar-

-¿Dónde?, ¿En la banca de un parque?-añadio

-Bella…-dije

-Lo siento-dijo ella-Es que estoy nerviosa y preocupada, no quiero que te quedes en un lugar extraño-

-Me preocupas-le dije

-Estoy bien-me aseguro-Papá me prohibió salir como ya te dije y me quito la laptop y el celular-añadio

- ¿si te quito el celular como...?-me aventure a preguntar

-Este lo tengo por que lucas me lo regalo, no lo habia utilizado, pero ellos no lo saben, asi que…-

-Eres lista-le dije medio sonriendo-Te amo-

-Igual que yo-me respondió-Ve con ellos-me pidió

-Bella…-Le dije-no lo hare- escuche como bufo y sonreí

-Da igual, lucas pasara por ti, en pocos minutos-me dijo

-¿Qué?- le pregunte y como si se sincronizaran, la campanilla de la puerta sono y atravesó el umbral un serio Lucas, recorrió el lugar con la mirada hasta que dio conmigo. Comenzo a caminar en mi dirección.

-Bella…-dije

-Las nuevas agendas electrónicas son una maravilla, puede mandar mensajes de texto como en un celular, incluso hasta llamadas, ¿Increible no?-dijo ella tratando de sonar alegre, pero fallo.

-Bella, yo no…-

-por favor Edward-me pidió-Estaria mas tranquila si te quedaras con ellos, hazlo por mi, por favor- me pidió-

-De acuerdo-dije al final

-Gracias amor- dijo ella-Te amo, se bueno con lucas y saluda a Elizabeth de mi parte, te llamo mañana, alguien quiere entrar al cuarto-dijo antes de colgar.

-hola-saludo lucas sentándose en la mesa

-hola-respondi bebiendo un sorbo de café.

-Asi que…-comenzo

-Se que bella te llamo-le dije-No finjas que te caigo bien-continue-Se que si no fuera por ella, ni siquiera estarías aquí-

-Tienes razón-dijo-Me caes mal, pero por alguna extraña razón bella te quiere- suspiro-Y eso es suficiente para que te ayude, asi que mueve tu trasero y vamos a casa-dijo casi levantándose

-Gracias-dije-Pero de verdad, no es necesario-

-Mira Edward-dijo el pasando una mano por su cabello-Estoy aquí por bella y por mi madre.

-¿por mi madre?-dije-¿o por la tuya?

-ambas-dijo el-Mi madre te tiene en alta estima y bella hablo con ella, asi que si no llegas, no eres el único que será reprendido-dijo bufando.

-No tienes que hacer esto-le dije

-Si tengo-me respondió el-Tengo que hacerlo, pero no lo entenderías-me dijo

-¿amas a bella, verdad?-le pregunte

-Si-respondio el-Pero como a una hermana, ya te lo dije-

-No entiendo… por que tanto interés- mencione

-Es algo que no entenderías, ahora, mas adelante si-me dijo encogiéndose de hombros restándole importancia.

-Gracias, por cuidar a bella-dije-Cuando paso todo lo de Londres y Alec-le dije moviendo nerviosamente la mano.

-Esta bien-dijo el -Ella es especial para mi-sonrio, como recordando algo, el mostro de lo celos quizo salir pero lo mantuve a raya.

-Gracias por eso tambien-añadi

-De nada-suspiro el-Vamos a casa-sonrio, ambos nos levantamos y deje un billete sobre la mesa para cubrir el expreso, salimos a la calle, la temperatura habia decendido mucho mas, el soplo frio del viento helaba hasta los huesos.

Caminamos a la par hasta su auto, nos detuvimos de pie junto a el, en lo que quitaba los seguros.-¿Quieres conducirlo?-me pregunto, lo mire enarcando una ceja

-¿Yo?-cuestione, estoy seguro que mi pregunta sono idiota, claro que yo, no habia nadie mas ahí.

-si-dijo el.

-No, gracias-dije, no me gustaba que me tuvieran lastima,

-Como quieras-dijo subiéndose molesto, bien si, me pase, pero no pueden pedir que me agrade de un dia para otro. Me subi en el auto y el lo encendio, manejo deprisa a su casa, no quería pasar mucho tiempo conmigo, cosa que agradecí, ya tuvimos nuestros cinco minutos por hoy, eso debía ser suficiente. Entro en su estacionamiento, habia por lo menos tres autos mas, además de una moto, ¿Le daba tiempo de conducir todos?

-Mamá nos espera en la sala-dijo girándose y desapareciendo por una puerta lateral

-¿Mamá?-resople- meti las manos en mis bolsillos y camine hacia ahí, arrastre un pie tras otro, estaba en una casa extraña, con gente extraña, pero a pesar de eso, extrañamente me sentía a salvo.

-Edward-dijo Elizabeth en cuanto me vio traspasar el umbral de la puerta, pronto me vi atrapado entre sus brazos, me relaje, ella tenia ese efecto en mi, un calmante natural, igual que mamá o bella. Le correspondi el abrazo, y sonreí contra su hombro

-Mi, pobre niño-dijo ella tomando mi rostro entre sus manos, sus ojos expresaban demasiada preocupación, como si sintiera mi dolor, pero ¿Por qué?, ella era casi una completa extraña, es decir, nos conocimos hace apenas un par de semanas, bueno mas de un mes pero…-¿Estas bien cariño?, ¿Necesitas algo?-me dijo acariciando mi mejilla, sonreí.

-No, gracias-dije al final.-Gracias por acogerme-

-De nada cielo-me dijo ella-En esta casa siempre serás bien recibido, acabo de hablar con tu madre y me dijo que vendrá a verte mañana-asenti-No se que paso cielo-dijo ella, lo mire extrañado, pensé que bella le habia contado, ella se dio cuenta y prosiguió-Bella no me conto todo-dijo,-Solo me pidió que te diera hospedaje y me platico algo superficialmente-aclaro.

-Gracias-repeti-No tenían por que hacerlo-

-Oh Edward-dijo ella-Te quiero mucho, al igual que a bella, asi que no digas mas-sonrio-Le pediré a maría que prepare algo para que cenes-se alejo caminando hacia la cocina, lucas se dejo caer en un sillón y encendió el televisor. Me senté en el otro sofá, la señora Elizabeth no tardo en regresar junto con maria, me sirvieron un gran plato de lasaña, me dedique a comer un poco bajo la inquisidora mirada de Elizabeth, lucas tambien ceno y luego subió a su habitación., Elizabeth despues de cenar me condujo por las escaleras, hacia un largo pasillo y llegamos a una habitación.

-Esta será tu habitación-me dijo, mientras abria la puerta, estaba decorada en tonos azules, tenia un escritorio, una laptop, un sofá del lado izquierdo pegado a la pared, además de un gran vantanal por el cual se miraba el cielo estrellado, no habia luz de luna, pero aun asi se veian algunas cuantas estrellas.

-Espero que sea de tu agrado-dijo Elizabeth regresándome a la realidad.

-Es muy bonito, gracias-ella sonrio-En el armario encontraras ropa, creo que eres de la misma talla que lucas, asi que no creo que haya problemas-

-Gracias elizabeth-le dije una vez mas

-De nada cielo, ahora descansa-ella me dio un beso en la frente y salió de la habitación dejándome solo, me sente en la cama, vi todo el lugar, no parecía una simple habitación de huéspedes, me pregunte si no seria la habitación de lucas, pero lo duda ya que no lo veo cediéndome su cuarto. Me quite los zapatos, y busque ropa en el armario, encontré varias mudas, de diferentes tipos, pero todas de los colores que me gustaban, me puse una pijama negra y me meti a la cama, esa noche no dormi mucho, tampoco es como si pudiera hacerlo, me preocupaba mi situación y la de bella, ¿Qué haría mi papá?, ¿Qué dirían, los demás?, pero antes que todo, tenia que encontrar a la odiosa de tania y hacerla pagar por esto.

En la mañana, la luz del sol se colo por entre las cortinas, una señora de unos 50 años o mas entro en la habitación para correrlas, le dijo que su ropa estaba lista y la señalo, ahí estaba en la silla correctamente doblada, cosa que me molesto, no me gusta que me digan como vestir, tambien me aviso que serviría el desayuno en algunos minutos, luego se retiro. Bufe, pero me puse de pie y entre a darme una ducha. El baño estaba en tonos marfil, una gran ducha con puertas de vidrio, un jacuzzy a un lado, y un vasto tocador con todo lo necesario para el aseo, jabones perfumados que se me hicieron de lo mas femenino, cosa que no usaría, al igual que tres diferentes tipos de shampoo, entre ellos estaba mi favorito, asi que solo tome eso y entre en la ducha. Sali como 15 minutos despues, me puse unos jeans y una sudadera azul, tennis y tome mi celular, hoy tendría que buscar donde quedarme, no podía abusar de la hospitalidad de los Masen.

-hola Edward-dijo Elizabeth en cuanto apareci por el comedor

-Buenos días-salude

-buenos días-respondi lucas, me sente y me sirvieron un tazon de fruta, tostadas, waffles, y todos los ingredientes para acompañarlos, desayunamos en silencio, cosa que agradeci.

-Señora-dijo la señora regordeta de nombre maria, si creo que asi se llamaba-Buscan al joven Cullen-añadio

-¿Quién?-pregunto ella

-Su madre-dijo-La señora esme-

-Hagala pasar, por favor maria-le dijo, me miro y asentí, me puse de pie y me disculpe luego camine hasta la sala, mi madre estaba de espaldas a mi.

-mamá-le dije, ella se giro y corrió hacia mi, me estrecho en sus brazos, yo la abraze de vuelta, esto es lo que necesitaba, el amor de mi mamá.

-Oh mi bebé-dijo ella-¿Estas bien?-me dijo tomando mi rostro entre sus manos, me hizo estar de perfil, y me inspecciono buscando algún daño, acaricio la zona de mi mejilla, donde mi padre me habia golpeado.-Es un tonto-dijo tocándola, sonreí

-No tiene importancia-le dije

-Si la tiene-me dijo ella-No tenia por que actuar como barbaro-añadio

-¿Tu como estas?-le dije mientras nos sentábamos en el sofá. Ella me miro y medio sonrio-¿Cómo estas bella-

-Bella esta muy triste, no quiere comer, tu padre la encerro en su habitación y ella inicio una huelga de hambre.-sonrei

-¿Y tu?-volvi a preguntar.

-Decepcionada-dijo-Tu y tu hermana son todo para mi, se que no tienen la culpa de esto, siempre hubo señales pero no las vi-dijo pasando una mano por su cabello-Lo posesivo que eras con bella, lo celosa que es ella contigo, la manera en que la mirabas, siempre quize creer…-suspiro-me obligue a creer que solo era cariño de hermanos, no se que hice mal-sollozo

-Tu no hiciste nada mamá-le dije, exasperado,-Nadie tuvo culpa en esto, ¡Diablos!-me queje-Esto no es una enfermedad, o alguna que se pudiera evitar, nos enamoramos, ¿Tan difícil de entender es?-inquiri

-Son hermanos Edward-me dijo ella-Hermanos de sangre-

-Lo se mamá-pase una mano por mi rostro, en un signo de frenar mi frustración-Siempre lo he sabido, pero ¿Crees que pude evitarlo?-

-Debiste tratar-me dijo ella

-Lo hice mamá-grite-Claro que lo intente, pero no pude, es mas fuerte que yo, esto me supera, la amo-dije desesperado

-No repitas eso-dijo mi madre-Cariño tal vez estés confundido-

-No mamá-aclare-Nadie puede decirme que lo que siento no es real, por que el que lo siente soy yo, y se que amo a bella mas que a nada-

-oh cielo-dijo ella derramando lagrimas-Es que todo esto es tan difícil-

-mamá-le dije acercándome a ella-Se que no es la mejor forma, y te aseguro que de haber podido lo hubiéramos evitado pero…-suspire-Nos amamos, y de verdad apreciaría tu apoyo-tome sus manos y ella me miro una fracción de segundo antes de alejarlas y ponerse de pie

-Te amo Edward-dijo-Eres mi hijo, y eso no cambiara nunca, pero no me pidas que acepte tu relación con tu hermana.- paso una mano por su largo cabello-Eso es demasiado, demasiado para cualquier madre-

-mamá-le dije

-Cariño yo te amo, eres mi hijo pero…necesito tiempo, estoy tan confundida, tan…por favor quedate aquí con Elizabeth, no te vayas de aquí-

-Mamá- le repeti-No puedo hacer eso, seria un abuso, hoy buscare algún hotel donde quedarme-dije metiendo mis manos en los bolsillos

-Edward-ella bufo molesta-De verdad, no creo que Elizabeth tanga problema con que te quedes, ahórrame otra preocupación, por favor…-suplico, arregañadientes asentí.

-De acuerdo-dije

-Gracias-susurro ella cansada-Me voy, tengo que intentar hablar con tu padre, el la esta pasando muy mal-

-Se que no es un consuelo pero…dile que lo lamento y que lo quiero mucho-casi susurre

-Se lo dire cielo-me dijo ella-Por favor, no trates de buscar a tu hermana, es lo mejor por ahora- tome su bolso y salió por la puerta, la observe marcharse mientras me sentaba en el sofá, lleve mis manos a mi rostro y lo talle, como queriendo borrar algo.

-¿Se fue tu madre?-pregunto lucas, levante el rostro y lo vi recargado en el barandal de las escaleras.

-si-le conteste

-Las cosas se arreglaran-dijo el-Asi que no estes asi-

-¿Por qué se arreglaran las cosas?-le cuestione enarcando una ceja

-Solo se que lo harán, ya lo veras-sonrio, trate de sonreírle de vuelta.

-Gracias-dije

-De nada-dijo el encogiéndose de hombros-mi madre y yo saldremos a Seattle por negocios, si quieres puedes ir o si lo prefieres quedarte o salir por tu cuenta, en el garaje hay un auto para ti.-eso ultimo me sorprendió, por lo que enarque una ceja y creo que mi mandíbula se abrió.

-¿Un auto?-cuestione

-Si-respondio lucas, algo extrañado-Es uno de mis autos, pero lo puedes usar, creo que te gustara, nos vemos por la tarde-dijo mientras se daba la vuelta y desaparecia tras la puerta, me quede un rato mas en el sofá, luego subi a la habitación que se me habia asignado, al entrar encontré en la mesita que esta junto a la lámpara dos juegos de llaves, unas eran de un auto y las otras pertenecían a la casa. Las tome, necesitaba buscar a tania, baje hacia el garaje y presione la tecla para quitar los seguro del auto, las luces del deportivo rojo parpadearon, sonreí, en definitiva me gustaba ese auto, abri la reja y Sali con rumbo hacia el pueblo, no tuve que buscar mucho, vi la camioneta de tania aparcada enfrente de la cafeteria, ella no vivía en el pueblo, pero supongo que se estaba quedando en el hotel, por suerte me ahorre el irla a buscar ahí. Me estacione al lado de su camioneta, la espere, no demoro en salir, venia con una vaso de café en la mano, usa un gorro de lana café, unas botas del mismo color que el gorro, una cazadora blanca, y traia sus audífonos puestos, venia tarareando una canción, no se percato de mi presencia, hasta que la tome del brazo.

-¡Que diablos…!-exclamo, soltando su vaso, este se estrecho en el piso y la tapa salió volando, logrando salpicar las puntas de mis tennis.-¿Qué te pasa Edward?-me dijo cuando me miro, se quito sus audífonos con la mano libre.

-¿Por qué se lo dijiste a mi papá?-le pregunte, ella sonrio y puso una cara de niña buena que no compre.

-no se de que hablas-me dijo soltándose-Yo no dije nada-sonrio

-No hacia falta-dije-Las Fotos hablaron por si solas- me apoye en su camioneta, ella sonrio y se acerco a mi.

-Ahh, las fotos-se rio-Un pequeño presente antes de irme-

-¿Por qué lo hiciste?-me miro enarcando una ceja y pasando uno de sus dedos por sobre sus labios

-La pregunta seria mi querido Edward-dijo-¿Por qué no hacerlo?-se dio la vuelta pero la tome del brazo y la estrelle contra su camioneta. Chillo

-Wow-dijo-Me gusta cuando te pones salvaje, como aquellas vez en el instituto ¿Recuerdas?-susurro pasando uno de sus dedos por mi pecho. Claro que lo recordaba, fui un imbécil por acostarme con ella para olvidar a bella, pero en aquel entonces, ni siquiera pensaba en que algún dia ella y yo estaríamos juntos.

-La verdad no-menti, ella bufo un poco molesta, pero medio segundo despues volvi a su actitud despreocupada de antes

-Lastima-dijo encongiendose de hombros, mientras miraba sus uñas-Yo si me acuerdo, recuerdo cada detalle-sonrio

-¿Por qué haces esto?-dije, golpeando el auto

-¿y todavía lo preguntas?-me grito-Maldicion Edward-dijo-No crei que fueras tan imbécil, deje todo por ti, todo-se golpeo la frente con su mano-Me fui a Londres porti, solo quería que me miraras, que me tomaras enserio, pero nunca lo hiciste, ahora se por que-suspiro-Pero ya no importa, y aunque no lo creas…esto lo hago mas por moral que por otra cosa-

-por favor tania-le dije-No seas ridícula, ¿Cuál moral?, si te tiras a todos los tipos que ves-ella bufo fingiendo indignación

-Piensa lo que quieras Edward-dijo despreocupadamente-Como te dije la primera vez que nos vimos, solo le hacia un favor a Alec, yo si soy fiel a mis amigos-abrio la puerta de su auto.

-Tania…-dije

-¿Qué?-dijo ella mirándome-Dejame en paz Edward, en vez de estar aquí, deberías estar buscando la manera de arreglar las cosas con tu papi dijo burlonamente-No creo que te perdone tan fácil el haber corrompido a su princesa-hizo una mueca triste.-Pero la vida es asi, uno no puede tener todo lo que quiere, espero que sufras mucho y que nunca seas feliz con tu hermana-

-Eres…-dije, trate de controlarme, era una mujer y jamás habia ofendido a una, aunque si tania seguía asi, seria la primera

-¿Una perra desgraciada?-me dijo enarcando una ceja-Si, lo soy, y lo digo orgullosamente, Algunos somos y otros solo lo intentan, yo lucho por lo que quiero hasta conseguirlo y si no es asi…-

-lo destruyes-complete

-Exacto-respondio ella-Hasta nunca Cullen-se monto en su camioneta y la encendió-Por cierto…-susurro-Cuídate de Alec, es mi amigo pero está un poco raro últimamente, Espero no vernos nunca mas-después de eso arranco.

-lo mismo digo-susurre a la nada. La observe alejarse, bufe y subi de nuevo al auto, tenia ganas de hablar con alguien, no sabia si jasper y los chicos ya sabían lo que paso. Asi que conduje hacia su casa. A la primera que vi fue a Alice, ella estaba sentada en los escalones del porche, al verme se levanto y corrió a mi encuentro.

-Edward-dijo abrazandome, quedaba a la altura de mi pecho, un poco mas abajo quizá, la rodee con los brazos y bese su cabeza-Tia Esme nos conto, cuanto lo siento-dijo

-Esta bien alice-dije, ella trato de sonreir

-Jasper esta adentro junto con rose …y emmett-dijo al final

-Creo que será mejor que me vaya-dije-Regreso en otro momento-

-Edward no-dijo ella

-Es lo mejor-le dije, me di la vuelta y camine de regreso hacia el auto, pero una voz me detuvo.

-Eddie-susurro una voz que conocía demasiado bien, y el que sabia perfectamente que odiaba ese nombre.

-Emmett-susurre, estaba en el porche junto a alice, en la puerta estaban jasper y rosalie

-¿Ya te vas?-pregunto- y sin saludar- añadió como reproche

-Yo…-dije rascando mi cabeza

-Eres un inbecil cullen-me dijo

-Lo se-susurre dejando caer los brazos, el se aproximo unos pasos y crei que me golpearía de nuevo, pero para mi sorpresa hizo todo lo contrareo, me abrazo.

-Todo esta bien Edward-dijo-Lamento lo del otro dia-dijo

-Yo soy el que se disculpa emmett-le dije-No debi ocultártelo-le dije avergonzado, nos dimos otro abrazo.

-Ahhh que lindos-susurro alice, regresándonos a la realidad y haciendo que nos soltaramos. Los hale rieron y nosotros tambien.

-Jasper-salude a mi mejor amigo, el me dio una palmadita en la espalda

-Entremos a la casa hermano-me dijo-Ahí podemos hablar con tranquilidad-añadio, sonreí, al menos habia recuperado a mis amigos, a todos, ahora solo me faltaba recuperar a mis padres.