Capitulo3
El edificio Goddard era
un dormitorio ruidoso y desordenado.
Mientras caminaba por
las grandes escaleras que conducían hasta el cuarto piso, vi a muchos de mis
nuevos compañeros de dormitorio riendo y bromeando unos con otros. Sin embargo,
su comportamiento estaba mucho más allá de cualquier comportamiento masculino
que hubiese visto en las pocas fiestas de sociedad a las que Jasper y yo
habíamos asistido. Los cadetes de Forks Academy hacían comentarios groseros,
contaban chistes sucios, se tiraban gases, escupían, se rascaban en las zonas
inconfesables, y se golpeaban el uno al otro con frecuencia.
Traté de no mirar
fijamente mientras me iba, pero era difícil entender sus acciones. Jasper nunca
había actuado así, incluso en la intimidad de nuestro hogar siempre fue un
perfecto caballero. Contemplé, perpleja, como un estudiante agarraba a otro
alrededor del cuello y frotaba el cuero cabelludo de la víctima fuertemente con
los nudillos gritando: "¡Coscorrones!"
—¡Suéltame! ¡Me rindo,
me rindo! —gritó el otro chico, pero no sonaba amargado. De hecho, ambos
parecían estar disfrutando. ¿Por qué? Era un misterio para mí. Me preguntaba
cómo diablos alguna persona podría disfrutar de golpear a alguien o ser
golpeado. Además, ¿cómo podían estudiar con todo este ruido? Compitiendo con la
música atronadora de varias habitaciones diferentes, casi pero no del todo
ahogando los gritos y risas masculinas de los juegos bruscos.